sábado, 2 de agosto de 2008

solos

Se sabe, desde hace tiempo:

Que nos escurrimos entre los rostros de nosotros mismos
Que nadie entiende los guiones ni las pausas ni los silencios
Que en la intimidad hospedamos multitudes
Que soplan innumerables vientos en nuestros oídos

Todo esto se sabe, desde hace tiempo

Lo que yo sé, además, y lo sé porque es abominable
Es que toda esta muchedumbre que se amontona
En la puerta giratoria de mi identidad,
Todo este burbujeo de carniceros heroicos,
De monjas vagabundas, de cíclopes daltónicos
Todos estos otros que pujan y repujan
En las gradas más remotas del cerebro,
Todos, y no exagero, todos, es decir
Cada uno de los mil, de los ninguno, de los infinitos,
Están solos.
Son estimulantes como una sutura, lo admito.
Son filamentos espectrales de vida.
Pero están solos,
Como santos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

che, esta bueno. me gusta.
que bueno que puedas escribir acá

ines